Iván Edeza

Junio de 2003

hace unas semanas leí un texto de galería integrado por preguntas que formaban parte de una instalación, me llamó la atención una en particular, en el contexto me pareció al mismo tiempo ingenua y pretenciosa Àpara qué diferenciar el arte del resto de la vida? subrayo que el contexto era una escuela de arte y la pregunta era formulada por un alumno, porque tuvo una respuesta inmediata en mi mente Ða la vida no te inscribes y nadie te pone una calificación que posteriormente se traducirá en una legitimación, no como artista, sino como profesional de las artes- esa disyuntiva entre arte y vida heredada de los 70 generalmente estuvo acompañada de la intención de cambiar al mundo. actualmente muy pocos artistas lo pretenden y espero que no lo consigan porque Ðcomentábamos maría linares y yo- a muchos se nos acabaría la chamba.
el interés por integrar arte y vida se ha convertido en un lugar común con resultados desagradables aunque se rescaten algunos casos. el proyecto daily services decide tocar esos aspectos que son pan de cada día, los actos que por cotidianos se realizan automáticamente. señala situaciones simples en las que descubrimos lo que está ahí sin la pesadez del discurso. a la manera de los juglares este par lleva el arte a los sitios que la gente frecuenta: el mercado del pueblo. el formato del que se sirven se modifica pero siempre está impregnado de convivencia jovial y lúdica, arte en la calle sin la opulencia de los monumentos, sin la estorbosa pretensión de inmortalizar a la piedra. es también una revisión del acto público, a veces llamado performance, en el que el gesto del actor hace una gran distancia con el espectador. en esos casos el artista se comporta como un sujeto especial que adoctrina con su cuerpo; en este caso se trata de vincular a un transeúnte con otro, tal como sucede en la plaza. la personalidad del artista queda en un plano muy lejano al espectador y se presenta la persona realizando una actividad común.
daily refreshments es, tal vez, el proyecto que más fácilmente puede entrar a un museo y que tiene referencias más inmediatas con los tópicos del arte. durante el evento se sirven bebidas de colores para posteriormente usar las bolsas numeradas que las contienen y armar un texto que habla del color. en este acto tan sencillo, encuentro una revisión jocosa del conceptualismo en las bebidas-lección que terminan definiéndose a si mismas.
una acción que podría complementar las refrescantes bebidas de colores es daily bread. digo que podría porque más allá de la obviedad de que el líquido complementa al alimento sólido y que el estereotipo de alimento es el pan (también símbolo de comunión) las estrategias de presentación en estos dos proyectos apuntan hacia diferentes sentidos. mientras que daily refreshments toca puntos vinculados con el arte daily bread me parece un comentario sobre la soledad y la fraternidad, las relaciones entre pares en esta arca de noé. el banco construido para daily shoeshine es un caso en que el objeto sirve de pretexto a una acción. en esta la pareja de artistas ofrece un servicio personalizado. me parece que la limpieza del calzado se convierte en un comentario acerca del intercambio económico; este servicio representa cosas diferentes en cada lugar, el rito de hacerse limpiar los zapatos por otro sujeto es una representación de patrones de conducta heredados. recuerdo, por ejemplo, las largas filas de boleros en la facultad de derecho de la universidad nacional autónoma de méxico, en donde los estudiantes aprenden los códigos y las fórmulas que deberán repetir en la profesionalización de sus esquemas. no es fortuito que sea precisamente en la escuela de leyes, así como afuera de los edificios en los que están los juzgados, donde los boleros son parte de la escenografía. otra cosa ha a considerar es el hecho de que sean dos mujeres las que realizan la representación de este oficio usualmente masculino en berlín, una ciudad que no lo requiere ni lo acostumbra.
otra invitación que en este caso toca el tema del subempleo es daily bags, el servicio del cerillo resignificado por daily services en donde se modifica la percepción del empacador. al menos para mi el hecho de ir al supermercado me ha sensibilizado para ver el rostro de la persona que empaca las compras, estudiar discretamente sus ademanes, intercambiar algún comentario y si es posible, elegir el diseño impreso en la bolsa de empaque para al regresar a casa, reciclarla. en ciudades donde no existe este servicio puede resultar impresionante o hasta incomodo que alguién alguien lo ofrezca. la bolsa, al igual que los uniformes y otros objetos diseñados para acompañar las acciones, son elementos que sirven para anclar en la memoria la actitud y el comportamiento coloquial de estas servidoras en la vía pública.
de manera más juguetona, pero retomando la misma postura de empleado frente al receptor, daily services invitó a la gente a un paseo por la ciudad de berlín en un transporte inusual, con el fin de convidar una visión distinta del espacio recorrido, cambiarla de posición, acomodarla y hacer que se deje consentir mientras la pasean. este es otro servicio que nos hace pensar en las diferentes relaciones que establecen los trabajadores en el llamado tercer mundo y los habitantes de las ciudades del primer mundo.
otra línea recurrente en las estrategias de daily services es el cuestionario, que acerca a diferentes ciudadanos por medio de preguntas relacionadas con su vivencia inmediata.
en daily questions hacen preguntas acerca del amor, explorando en un terreno complicado al utilizar los esquemas sicológicos y una de sus aplicaciones más superficiales; el test para el autoconocimiento. el resultado más que descubrirnos algún aspecto oculto de la personalidad nos hace pensar en el tipo de preguntas o respuestas que uno mismo formularía.
si las telenovelas nos hermanan como parte de un continente que tiene como lengua común el español, es posible notar las diferencias en daily tones al conectar a los habitantes de dos ciudades por medio de una lectura, una referencia a dos sensaciones; audio y color, el acento, el oído y la visión. el arte se hace a un lado para ser vivido en la misma forma con que se reciben otros consumos urbanos.
entre los asuntos que se pueden revisar a partir de los proyectos de daily services me interesa particularmente un aspecto que se puede encontrar entrelíneas, la soledad que vive una persona en una comunidad. soledad que se manifiesta en muchos de los actos habituales, como buscar el autoconocimiento al resolver el test que aparece en una revista o coquetear en internet para encontrar pareja, muchas de estas reflexiones subyacen en la aparente simpleza de las acciones de daily services otro dato interesante para revisar el trabajo de angélica y maría es el precio de la obra. su trabajo artístico recupera el Òvalor realÓ del objeto, que pierde el aura de obra de arte para convertirse, por ejemplo, en una edición de 60 playeras 100% de algodón impresas en serigrafía que se vendieron a los transeúntes en $ 8,000.oo pesos colombianos en la ciudad de bogotá y en $30.oo pesos mexicanos en en distrito federal. no me imagino que suceda lo mismo que con algunos videos de artista que alcanzan precios altísimos al hacer una edición de tres, la máxima contradicción en un medio de reproducción. finalmente, si se trata de convivir en una ciudad, he decidido hacerlo con las personas que me simpatizan. tal vez por eso me invitaron a compartir esta presentación, en la cual decidí eludir la argumentación teórica que respalde lo escrito, por dos razones; primero por mi limitada capacidad y segundo por sentirme contagiado por el espíritu de estas servidoras cotidianas.



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